VOLVIÓ NAVIDAD !FELIZ NAVIDAD!

 




VOLVIÓ NAVIDAD !FELIZ NAVIDAD!


¡Navidad! …vuelve navidad, volvió navidad a casa. ¡Aleluya, Aleluya!

No estuviste el pasado año, no fue tu culpa. Solo, de lejos, te vimos venir sin el contagiante encanto de un diciembre que quedó atrás.

 

Vuelves, navidad añorada, con nostalgia aun latente de los ausentes que, en 2020, no alcanzaron a llegar.  Muchos, muchos de los que estaban, en viaje sin retorno, se fueron, dejando  inmenso dolor en el alma. 

Solitarios pasamos los que apesadumbrados quedamos con el ferviente deseo de celebrar tu sagrada festividad.

 


Vuelves, sempiterna navidad, tras durísima prueba que minúsculo corpúsculo viral impuso y en harta cuarentena nos tuvo.

Jamás fuera, habías estado, de mi agenda existencial. Sentí como si hubiera transcurrido una eternidad tras tu temporal y callada retirada.

 

Vuelves, navidad amada, ¡Bienvenida seas!

Ya la gente a sus hogares, contenta y querendona, llegando está.  La familia y los amigos de nuevo encontrarse pueden para sentir el cariño y aprecio de tantos seres que amamos y, también, nos quieren.

 


Vuelves, navidad solidaria, envuelta con tu singular mensaje de alegría, paz y prosperidad. La esperanza que en mi revive y en el espíritu de los que en ti creemos, resplandece. Por un porvenir dichoso, pleno de felicidad.  

 

Vuelves, navidad santa, con el recuerdo, siempre ahí, de mi remota infancia en la que un niño Dios, sigiloso, dejaba ansiados regalos a un costado de la cama.

 

Vuelves, navidad querida, y mi pensamiento se aviva con la imagen de mi justa madre regalando amorosa, en la nochebuena,  aguinaldos a los chicos pobres de la vecindad.

 


Vuelves, mágica navidad, con el rojo y verde de tu vistoso paisaje a enseñarnos que la vida es una fiesta a la que todos estamos invitados hasta que se apaguen las velas.

 

Vuelves, sonora navidad, con tus bulliciosos canticos: “Noche de paz” “Tun Taina”, “A la Nanita Nana, Nanita Ea”, que con mis hermanos coreaba durante el hogareño rezo de la novena.

 

Vuelves, navidad radiante, con tus luces y bengalas a iluminarnos la fe en el hombre, en la humanidad, que un mejor mañana espera, de odios y pandemias liberado.

 



Vuelves, navidad bonita, a mi corazón agradecido llenando de sueños nuevos, fantásticos,  mis infantiles y jubilosos años viejos en que  enhorabuena me plazco.

 

Vuelves, navidad preciosa, con tu encanto celestial, pródiga en favores angelicales, para los hombres de buena voluntad que “Gloria in excelsis Deo, hacia los cielos cantan.

 

Vuelves, navidad soñada, para declararte mi amor de ayer y de hoy que mi musa inspira. Por siempre te amaré.

Cuando ya no esté, cierta puedes estar, seguiré queriéndote a través de mis hijos y mis nietos que entonan villancicos y tocan panderetas al niño de Belén.




¡Volvió navidad…Feliz navidad! 

Deseo a los amables lectores de Teomedicadas.blogspot.com


Barranquilla diciembre 16 de 2021.

Teobaldo Coronado Hurtado.

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