EFRAÍN GAINES. EL MAGO DEL ESCALPELO
De izquierda a derecha doctores: Santander Rosales, Efraín Gaines, Teobaldo Coronado, Jaime Mercado, Carlos Villalba. |
EFRAÍN
GAINES. EL MAGO DEL ESCALPELO
En este primero de octubre de 2023 son muchas las llamadas que he recibido de amigos médicos y conocidos para solidarizarse conmigo, solidarizarnos en un sentimiento de pesar común a todos, por la triste partida del amigo, colega y compañero, del gran arquetipo de la cirugía el doctor Efraín Segundo Gaines Acuña.
Consternados, indagan y comentan sobre la vida del admirable cirujano a
sabiendas de mi cercanía con el ilustre galeno, de nuestra andanza quirúrgica en el Hospital General de Barranquilla y la docente en la Universidad Libre; de los lazos que nos unían desde los vetustos pabellones del Hospital
Santa Clara en Cartagena.
El
doctor Gaines iba tres años delante de mí en
tiempos que existía una integración tal, entre los estudiantes de
medicina de la Universidad de Cartagena, que desde los primíparos hasta los de
último año estábamos interrelacionados por el reducido número que cursábamos la
carrera, unos 200 aproximadamente.
Desde
mi estatus de interno y Gaines como residente, en el Santa Clara, surgió una cordial amistad que se fortaleció, aun mas, en los quirófanos del Memorial
Hospital y perduró, ininterrumpida, a través del tiempo.
Callado,
sereno, prudente y humilde brillaba con luz propia bajo las cieliticas de los quirófanos
con la destreza heredada de los sabios quirurgos del Santa Clara, profesores: Francisco
Obregón Jaraba, Carlos Barrios Angulo, Luis Carlos Seba Obregón, Adolfo Pareja
Jiménez, Horacio Zabaleta, Belisario Solana, Manuel Antonio Bermúdez y Guillermo Valencia que le endosaron las enseñanzas necesarias para
convertirlo en un verdadero mago del escalpelo.
Es,
sin duda, Efraín Gaines, prototipo de la insuperable escuela médica
cartagenera, de franca raigambre hipocrática, de la que amamantamos una
generación de médicos del siglo pasado que recibimos una insuperable formación
clínica, la del “ojo clínico”, que contrasta, humanizada, con la mecanizada educación tecnocientífica de las nuevas promociones de galenos, la del “ojo virtual”.
Sin
embargo, lo manifiesto en mi último libro “Del Arte de los Dioses”, somos
médicos “de los de antes y de los de ahora” en cuanto pudimos acoplarnos, sin
dejar de ser el clínico singular que nos caracteriza, a la moderna tecnología
médica cibernética.
Mientras
no estaba en cirugía recorría Efraín salas y pabellones, con su infaltable larga
bata blanca, portando en su bolsillo un baja lengua, un guante estéril y una
sonda nasogástrica.
_
De turno, los dos, se acercaba, preocupado, y me decía: “Hola Coronado, en la sala Putnam Tanco se
encuentra una viejita, programada para colecistectomía, pero, le han suspendido la
cirugía en varias ocasiones. Será que me das la anestesia, ahora, para operarla
aprovechando que no hay ninguna urgencia, que todo está tranquilo. Colabórame
vamos a ayudar a esa pobre señora". Característica suya la dedicación amorosa,
solidaria y caritativa por los pacientes.
Con magistral rigor semiológico, que a sus estudiantes cautivaba, examinaba boca, garganta y practicaba tacto rectal a cualquier paciente con patología abdominal. Sin ecografías, resonancias o estudio radiológico subía a cirugía pacientes con diagnóstico de apendicitis, ante la carencia de estos medios diagnósticos en el viejo Hospital de Caridad.
Tacto rectal doloroso, diferencia
de temperatura anal con la oral, Blumberg positivo, recuento leucocitario alto
y la anamnesis le bastaban, con un margen de error mínimo. No recuerdo haberlo
visto practicar una “agueitotomía” (Laparotomía en blanco) muy frecuente entre
cirujanos dependientes, a ultranza, de resultados ecográficos y de laboratorio.
v
_
En el quirófano me alistaba para iniciar anestesia a un paciente con diagnóstico
de apendicitis. Para ser intervenido por un cirujano recién llegado al
hospital.
Entra
Gaines, que tenía cirugía en otra sala vecina, inquieto y curioso, me pregunta:
- ¿Coronado que van a hacer aquí? Una
apendicectomía le contesto.
Revisa
la historia clínica, posa sus manos, escrutadoras, sobre el abdomen del paciente y pide sonda
vesical a la enfermera.
Pasa
la sonda de Nelatón y evacua cantidad considerable de orina retenida. !Error¡ tenía enorme globo vesical.
_ Cauteloso y con el mayor disimulo comentó su
hallazgo y dio su veredicto al cirujano colega. El paciente se salvó de que le
dieran cuchilla.
v
Gaines
tenia una personalidad singular. Serio y circunspecto siempre, de pocas
palabras en la relación interpersonal, era un despeñadero de elocuencia didáctica
en la catedra. Un maestro de maestros, verdadero magister del arte de la cirugía.
Mayores
seguidores son sus alumnos de la Universidad Libre, seccional Barranquilla,
que hoy lamentan compungidos su ausencia definitiva del aula de clases y de los
quirófanos. La reminiscencia grata de su magisterio será acicate que los
estimulará a seguir la excelencia de su ejemplo.
Grandes
admiradores sus colegas. Respeto inspiraba la nobleza de su gesto, la
generosidad en los momentos difíciles, su concepto autorizado en situaciones escabrosas en que reinaba la duda, la incertidumbre y el desespero.
Gratitud infinita le guardan sus pacientes. Yo mismo, agradecido, soy uno de ellos y así una infinidad
más, que recibimos la bendición de su talento y manos prodigiosas, agradecemos a Dios lo tenga
gozando la paz de su santo reino.
Descansa
en paz amigo, colega y compañero.
Barranquilla octubre 2 de 2023
Excelente semblanza de tan excelente médico, genial y extraordinario cirujano.More en la gloria eterna.
ResponderBorrarExcelente Médico. En mi condición de Secretaria de Gerencia del Hospital, tuve la oportunidad de conocerlo y admirarlo como excelente persona y por su interés y dedicación a sus pacientes. Dios lo reciba en su Santa Gloria
ResponderBorrarSiento un profundo dolor al enterarme de esta triste noticia,conocí y trabaje en el Hospital Barranquilla y doy fe de la calidad humana de este profesional profesional que Dios lo tenga en su santa gloria y mucha fortaleza para su familia .Paz en su tumba
ResponderBorrarExcelente... Asi Mismo ... mejor no se podria describir... Que Dios tenga a Mi Tio en su reino
ResponderBorrarReal descripción y merecido homenaje para el Dr Efrain Gaines Médico Cirujano. Gran Legado nos dejo a quienes tuvimos el privilegio de aprender y compartir con él
ResponderBorrarQue en paz descande
Gran persona, amigo, humilde y profesional excelente. Compartí habitación yo como interno y él como profesor, estoy orgulloso de su guía y amistad. Descansa en. Paz.
ResponderBorrarMuchas gracias doctor Coronado por escribir estas hermosas memorias. Lo apreciamos mucho.
ResponderBorrarMuchas gracias doctor Coronado por estas hermosas memorias. Lo apreciamos mucho.
ResponderBorrarExcelente profesional, docente admirado por todos sus estudiantes y colega. Siempre con el libro X debajo de sus brazos. QEPD.
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