HIPÓCRATES. PENSAMIENTO EPIDEMIOLÓGICO. Edición No 150
HIPÓCRATES.
PENSAMIENTO EPIDEMIOLÓGICO
•
“La vida es breve,
•
la medicina interminable,
•
el tiempo es poco,
•
el intento arriesgado y
el juicio
correcto difícil de lograr.
Hipócrates.
Estatua en la ciudad de Cos que representa a Hipócrates enseñando a sus discípulos. (Tedmek/Wikicommons)
Resumen
Se exponen razones por las cuales Hipócrates es considerado Padre de la Medicina y Padre de la Epidemiología. Acompañado de un análisis breve del “Corpus Hippocraticum”, su obra magna, en los textos que hablan “De las Epidemias” y origen de las enfermedades. Se trata de encontrar la relación que existe en el pensamiento hipócratico de tipo epidemiológico con la actual pandemia del coronavirus.
Introducción. La palabra
epidemiología del griego “epi” (encima), “demos” (pueblo) y “logos”
(estudio), etimológicamente significa estudio de “lo que está sobre las
poblaciones”; el estudio de las epidemias. La epidemiología es pieza
fundamental de la salud pública en todo lo relacionado con la prevención de
enfermedades. Compromete en rol
igualitario a los individuos integrantes de una comunidad como a los
profesionales encargados de la prestación de los servicios médicos.
Según la OMS “La epidemiología es el estudio de la distribución y los determinantes de estados o eventos (en particular de enfermedades) relacionados con la salud y la aplicación de esos estudios al control de enfermedades y otros problemas de salud”.[i]
“De las Epidemias”
es capítulo que forma parte del libro V de la considerada obra cumbre de la
medicina de todos los tiempos el “Corpus Hippocraticum”. Este tratado es
una variada recopilación de escritos médicos del siglo V, A.C, de distintos
autores de las escuelas médicas de Grecia, seguidores de Hipócrates, compilados
por la Biblioteca de Alejandría, en el siglo III A.C, en 53 tratados reunidos
en nueve volúmenes. En lenguaje moderno podríamos decir que el Corpus
Hipocraticum tiene la autoría de Hipócrates y sus colaboradores, es decir los
integrantes de la Escuela Hipocrática o Hipocratismo como la denomina Laín
Entralgo.
El brillo de la Escuela de Cos continuo, después de
la muerte de Hipócrates, con sus hijos Thesalo y Dracón, su yerno Polibio, su
pariente Praxágoras y Diocles de Caristo considerado el segundo Hipócrates, a quienes
se atribuyen parte de los escritos de la obra[ii]
Hipócrates
Padre de la Medicina
Para una
conferencia sobre los “Padres de la Medicina” que dictaba - profesor de Historia de la Medicina en la
Universidad Simón Bolívar de Barranquilla - me refería allí, al origen de las especialidades
médicas; entre otras: cirugía, ortopedia, patología, ginecología y obstetricia, pediatría,
oftalmología, Psiquiatría y anestesiología; en su preparación descubrí,
maravillado, que primer antecedente histórico, de cada una de ellas, se
encuentra en esta magna obra. Puede uno deducir que razón poderosa para
reconocer a Hipócrates, padre de la medicina, se lo otorga el hecho de ser, al
mismo tiempo, pionero de gran número de sus especialidades.
Es Hipócrates, además, considerado padre de la medicina por dar a la práctica médica la orientación racional que sienta las bases de una verdadera ciencia con un soporte ético (juramento) y la jerarquía académica que, hoy en día, 2500 años después, es orgullo de sus fieles discípulos. “La hazaña hipocrática es el acontecimiento más importante de la historia universal de la medicina… la constitución de esta como un saber técnico – techkné, iatrike, ars médica – fundado sobre el conocimiento científico de la fisiología”.[iii]
En condición
de “iatros” (médico) abandona, Hipócrates, la creencia mágica de que las
enfermedades eran resultado del castigo divino en represalia a los vicios y
pecados cometidos por el enfermo, sus padres o antepasados.
“Epidemias”
Del contenido
todo del “Corpus Hippocraticum” (nueve volúmenes) los
historiadores atribuyen a Hipócrates la autoría, en particular, de los escritos
compendiados en:
Volumen I que trata del médico y el Juramento Médico.
Volumen I que trata del médico y el Juramento Médico.
Volumen III
que habla sobre las dietas y sobre los “aires, aguas y lugares”.
Volumen V que se refiere a las enfermedades y
a las epidemias. Los libros sobre las “Epidemias I y II[iv], contenidos en este volumen,
exaltan a Hipócrates como “Padre de la Epidemiología”.
Para la época la palabra "epidemia”
pasó de significar "sobre la población" a "algo que circula o se
propaga entre la población"[v],
tal cual se acepta en nuestros días.
Síndrome de Tucídides. Tocó a Hipócrates ser testigo de la
epidemia que se presentó en Grecia, la Plaga de Atenas, durante la guerra del
Peloponeso, en el gobierno de Pericles, y que se conoce, también, con el
apelativo de “Síndrome de Tucídides”, por ser este personaje el que hace su
descripción, la primera conocida de una epidemia en la que murieron 30.000
personas; veamos uno de sus apartes, en nada ajenos a la vivencia actual
experimentada con el Covid 19: “Nada podían hacer los médicos por su
desconocimiento de la enfermedad que trataban por primera vez; al contrario,
ellos mismos eran los principales afectados por cuanto que eran los que más se acercaban
a los enfermos; tampoco servía de nada ninguna ciencia humana.
Elevaron, asimismo, súplicas en los
templos, consultaron a los oráculos y recurrieron a otras prácticas semejantes;
todo resultó inútil, y acabaron por renunciar a estos recursos vencidos por el
mal”. [vi]
Enfermedades. Clasificación
El padre de la medicina en una de sus
clasificaciones sobre las enfermedades las divide en naturales(phisys) o
individuales y epidémicas o colectivas. [vii] En el capítulo del volumen III que versa sobre “Aires, aguas, y
lugares” señala que el clima, calidad de la tierra, los vientos y el agua
son ingredientes que influyen en la población para el desarrollo de
enfermedades, al intervenir sobre el equilibrio del hombre con su medio ambiente”.
Estos factores en especial los que
afectan el aire, miasmas les llama, traen como consecuencia la enfermedad
colectiva, la epidemia. A la luz del pensamiento hipocrático no debe parecernos
extraño, por lo tanto, la presencia del coronavirus en el aire que respiramos y
expulsamos por la boca cuando hablamos. Que justifica el uso riguroso del
tapabocas para evitar su contaminación.
Por otro lado, en su tratado sobre “La Dieta” considera que la alteración del “Régimen de vida”, en especial el que tiene que ver con la dieta, la mala dieta, es causa primordial de enfermedades individuales. En uno de sus aforismos reafirma este concepto cuando aconseja: “Que la comida sea tu alimento y el alimento, tu medicina”. Enfermedades de la civilización[viii] o de la vida moderna llaman ahora a patologías relacionadas con el “Estilo de vida”, versión moderna de la tesis hipocrática sobre el “Régimen de vida”; entre otras: Obesidad, diabetes mellitus tipo 2, síndrome metabólico, osteoporosis, hipertensión arterial, infarto del miocardio, cáncer, insuficiencia renal crónica, alergias y asma.
Es evidente, epidemiológicamente, más allá de la edad misma, la vulnerabilidad hacia el Covid 19 de los que padecen algunas de estas patologías, en especial los que presentan obesidad, diabetes, asma e hipertensión arterial, para dar como cierta la inquietud hipócratica.
Galeno e Hipocrates de Anagni Italia Foto: Nina Aldin Thune CC BY-SA 2.5, https://commons.wikimedia.org/w/index.php?curid=795032
Colofón
Profético, “el
más grande de todos” - así lo apreciaba Aristóteles - el hombre nacido en la Isla de Cos, en su
dictamen sobre causas de las enfermedades que encaja, no hay duda, con el
pensamiento epidemiológico actual; en lo que tiene que ver con el “régimen de
vida” (vulnerables) y lo relacionado con el cambio climático y deterioro del
medio ambiente que, algunos expertos piensan, ha favorecido la cruel embestida de la pandemia
que hoy agobia a la humanidad entera.
Quiero resaltar,
finalmente, la vigencia del ideario hipocrático en la dimensión ecológica, de
la medicina como ciencia al servicio de la vida, que proclama y defiende la bioética.
El espíritu altivo, además, de quienes siguen sus pasos, enaltecidos, en este
momento crucial, por la gran cuota de sacrificio dada por bravos profesionales
de la salud, mártires gloriosos, que
han perdido la vida en esta batalla; y
de los que siguen, valerosos, en primera línea, frente a la difícil trinchera
en contra del mortal enemigo del coronavirus.
Barranquilla julio 25 de 2020
Teobaldo Coronado Hurtado
[i]
https://www.who.int/topics/epidemiology/es/
[ii] Roger Romo Ignacio, 1977, Historia de la Medicina,
Editorial Bruguere, Mexico, p. 94
[iii] P. Laín Entralgo,1976, Historia Universal de la Medicina, Tomo II, Medicina Hipocrática, Salvat Editores, Barcelona, p.73.
[iv] Ibid. P. Laín
Entralgo, p. 391-4
[v] Luis Miguel Pino Campos y Justo
Hernández González. REVISTA DE FILOLOGÍA, 26; enero 2008, pp. 191-204
[vi] Traducción de Juan José Torres
Esbarranch, 1990, pp. 167-8, Biblioteca Clásica Gredos 149). Tucídides II, 47:
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