TEOMEDICADAS 2017 - 2024

2017. REFLEXIÓN FINAL El 2017, un año que se va. Se fue. No va más. Hacia adelante, un año menos de existencia. El 2017 forma parte, ya, del pasado. Regocijémonos con el año que llega: el 2018. Un presente de 365 días, optimistas de renovarlo el próximo 31 de diciembre. Para esta misma fecha en 2016, la gente, en especial los mayores, reflexionaban sobre la certeza, de llegar a estas calendas, en pleno disfrute de la existencia. Muchas de esas personas, por desventura, ya no están. Los que aun cantamos Gloria, como en la canción que popularizara la Negra Sosa, Mercedes Sosa, demos  “gracias a la vida que nos ha dado tanto” ; por lo que somos, lo que tenemos, por lo que en el momento que tocaba hicimos.  Celebremos la dicha infinita de todo lo alcanzado, con la resignada modestia de los que poco tienen. Nada de aflicción por lo que lograr no se pudo. Lo que convino llego, y vino para nuestro bien. Con la mente ocupada en el ahora, cuando el año que pasó, el ayer, es

LLEGÓ NAVIDAD Tiempo propicio, época grata, para revivir un feliz encuentro con el niño travieso que quedó atrás, invisible, en lo recóndito de nuestro ser.  No es mi intención revivir al pequeñín egoísta y caprichoso que, en la actitud natural de un infante todo lo quería para sí. Me anima, ahora, renovar recuerdos sobre el otro niño, el chico bueno, de sonrisa vivaz, rostro alegre, mirada escrutadora y pura, expresión inocente y tierna. Las mayores dificultades que agobian la existencia, como personas adultas, obedecen, si lo pensamos bien, a que olvidamos, no ponemos en práctica  el noble oficio de  niños. Si indagáramos, más a menudo, como lo hacen de manera habitual los chiquillos, con un curioso e inquieto ¿por qué?  Sobre el ¿porqué de las cosas? Sobre el ¿porqué de todo cuanto tiene que ver con el rumbo de nuestras existencias? Sobre el sentido de nuestra vida. Sobre el porqué de penas y alegrías, sufrimientos y dicha, amores y rencores; de seguro, mu

Balcón. Edificio NOVUS, Barranquilla  LAS VELITAS Son varias, de muchos colores Sobre el pretil en orden están Que la necia briza trata de apagar Y cada vez brillan más, Titilan y titilan dentro sus farolas Que las han de sobre guardar Son las velas, las velitas Del día 7, de la navidad Para la virgen de la inmaculada en la madrugada del 8 ha de volar Por el alto cielo de la vecindad Según vieja tradición de mi ciudad Son, una por cada uno De la familia, que puesta está A la madre de Dios, una velita A la que con fe gracias queremos dar Por las bendiciones recibidas   en este año, que ya se va Son las fiestas de las velitas en curramba lo mejor, desde que yo soy niño no he visto otra superior porque es la virgen la patrona de toda su población. Dios te salve Reina y madre Dulce esperanza de tus protegidos Danos tu bendición, te lo pedimos en la noc

DÍA  PANAMERICANO DEL MÉDICO HOMENAJE AL DOCTOR HABIB SANTIAGO Hace 3 días,  en el auditorio de la Universidad Libre,  participaba, como moderador, en un conversatorio sobre la “Evolución de la Medicina”,  con motivación igual a la que nos congrega esta mañana: “El Día Panamericano del Médico. Un colega, de los asistentes, preocupado por la desidia del gremio, ante la discusión que se planteaba por la venida a menos del profesionalismo médico, por la crisis de la profesión, preguntaba:  ¿Qué donde estaban los dirigentes médicos?  ¿Desde cuándo perdimos el liderazgo que antes teníamos en la sociedad? A mi modo de ver son varias las causas que han llevado la profesión médica a la pérdida de imagen que otrora ostentaba y su consiguiente devaluación laboral. 1.     La implantación del Seguro Social 2.     La Constitución del 91 3.     La Ley 100 de 1993 4.     La proliferación de facultades de medicina El momento no es propicio para hacer un análisis hi